Escuela de la vida para una vida mejor

Letonia

Asociación Liepāja Ciego

Ganību street 197/205, Dunikas iela 1- 1, Liepāja, LETONIA Telf.: 63431535, 26544442 Email: liepajas_nb@inbox.lv Sitio web: www.redzigaismu.lv

ONG

El centro de rehabilitación “Escuela de la vida” se creó para proporcionar rehabilitación social y una política de apoyo a personas con discapacidad visual o de otro tipo; para facilitar la adquisición de habilidades sociales, la integración social y el retorno al mercado laboral, actualizar y mejorar las habilidades sociales, así como aumentar la conciencia del principio del diseño universal. El centro “Escuela de la vida” es un punto de apoyo para que personas que viven fuera de la ciudad reciban servicios de rehabilitación social.
Están uno o dos meses en la “Escuela de la vida”. Su alojamiento corre a cargo del municipio y la financiación de diversos proyectos. Durante este periodo, se elaboran u se implantan, para ellos, y de acuerdo con sus capacidades, planes individuales de rehabilitación social. En colaboración con otras instituciones, las personas con discapacidad reciben asesoramiento sobre las posibilidades de recibir la ayuda y el apoyo social adecuados y oportunos. Las clases van enfocadas a adquirir habilidades sociales e individuales para mejorar la calidad de vida. El/la “estudiante” se alfabetiza a nivel informático, aprende a leer y escribir en Braille, a orientarse con el bastón de caminar blanco, a tejer artículos de mimbre, la técnica del macramé, a mejorar sus habilidades culinarias. Se producen muchas conversaciones sobre la vida, sobre los planes pasados y futuros, discusiones sobre las capacidades de una persona con discapacidad, sobre el significado de los cambios en la vida. En muchos casos estas personas necesitan primero creer realmente que ¡pueden hacer muchas cosas!
Al crear la “Escuela de la vida” pensamos mucho sobre la implantación del diseño universal, para hacerlo accesible a personas con problemas de visión, de oído y de movimiento, considerando de este modo el derecho de todas las personas de participar plenamente en todas las áreas de la vida.

Uno de los grupos destinatarios lo forman los miembros de la familia de las personas con discapacidad. Hemos visto muchos casos en que los familiares, deseando lo mejor para sus más allegados, han enseñado a una persona con discapacidad a ser indefensa. Se le prepara todo y se le deja todo a punto. Cuando invitamos a alguien a quedarse en la “Escuela de la vida”, también invitamos a sus familiares a participar en las mismas clases. El objetivo es mostrar que, a pesar de la discapacidad, todo el mundo es capaz de hacer muchas cosas de manera independiente.

Desde su inauguración en 2006, han usado este servicio 16 personas con trastornos de visión. Están muy satisfechos con las nuevas habilidades y capacidades, así como con el apoyo psicológico. Algunos viven en sus casas para discapacitados, algunos tejen artículos de mimbre y dos se han inscrito en una universidad.

Todos los titulados han expresado su gratitud por esta oportunidad. Muchos han reconocido que han tenido miedo, que no querían ir solos a un lugar al que no estaban habituados, y que no tenían fe en sus puntos fuertes. Pero al final, la alegría de conseguir hacerse la primera taza de café sin ayuda de los demás, el primer huevo duro, la cesta de mimbre, escribir la primera carta en Braille, la alegría por la posibilidad de soltarse y romper la rutina diaria.

La “Escuela de la vida” se promueve en los municipios a través de los trabajadores sociales, que tienen más información sobre sus municipios. Las historias de personas que obtienen un título se divulgan en el periódico de la organización como buenos ejemplos para animar a otros.

La “Escuela de la vida” es un ejemplo práctico para reforzar el principio del diseño universal. Se ha promocionado en municipios, escuelas, empresas y ONGs.

Personas con discapacidad, integración, calidad de vida, diseño universal